Viajar al Gran Sur de Túnez es la mejor opción, por su cercanía y seguridad, para navegar por grandes dunas desde España. Pero unos acontecimientos imprevistos surgidos horas antes de iniciar el viaje hicieron tambalear una aventura que todos esperábamos con ansiedad desde hacía semanas. He aquí la crónica del viaje que un grupo de mujeres, hombres y niños de Territori 4×4 lograron superar con éxito, venciendo como si gladiadores se tratara todas las dificultades que aparecieron antes y durante la travesía.
Viernes y sábado 14-15 marzo 2008
Como la mayoría de viajes que hace Territori 4×4 a Túnez, la salida estaba prevista el sábado desde Marsella, pero esta vez el destino en forma de huelga nos jugó una mala pasada.
El viernes a las 10 de la mañana, 24 horas antes de embarcar, nos comunica la compañía naviera que hay una huelga que hace anular la salida del ferry a Túnez desde Marsella, con más de 40 vehículos en varios recorridos entre Túnez y Libia, logramos que una gran parte de ellos salga con CTN desde Génova, de esta forma todos estos participantes no perderán ningún día de sus vacaciones y podrán cumplir con las rutas preestablecidas. En ese grupo a de Génova va un grupo de pilotos y 4×4, la Tunisian Gran Sur Xtrem, que van intentar hacer la travesía desde Borj el Khadra hasta Timbaine, cruzando el Gran Erg oriental por su parte central.
Domingo 16 marzo 2008
El grupo de la Tunisian Gran Sur, saldrá el domingo a las 17 horas desde Marsella, con una pérdida de casi 30 horas sobre el horario establecido. Muchos participantes del Raid, deciden ir el viernes por la noche hasta la Provenza, y pasar el sábado de una forma relajada visitando el Parque de la Camarga y la desembocadura del Ródano.
El domingo a las 15 horas, el grupo al completo está embarcando en el Danielle Casanova, uno de los mejores barcos de la SNCM que en pocas horas, si todo va bien, pondrá rumbo a Túnez.
Por fin a las 17 horas del domingo 16 de marzo zarpamos hacía el Norte de África. Con el barco siguiendo su derrota por el Mediterráneo y antes de cenar hacemos una reunión en la Sala de Conferencias del buque para comentar la estrategia que seguiremos. En esta reunión queda demostrada la voluntad inequívoca que el grupo quiere mantener hasta las últimas consecuencias la ruta prevista por la Organización.
Lunes 17 marzo 2008
Pasan las horas de plácida navegación hasta llegar al Puerto de la Goullete en Túnez, pasamos la aduana y con la moral al límite iniciamos por autopista el recorrido hasta Matmata, donde llegamos sobre las 11 de la noche. Cenamos un buffet libre que la dirección del Hotel nos había reservado y el grupo se retira a dormir, cansado pero muy feliz por estar en el punto que la Organización había previsto alojarse.
Martes 18 marzo 2008
Hoy se hace una ruta turística muy interesante, por asfalto y pistas, visitando algunos recónditos Ksares y pueblos llenos de encanto de esta antigua región bereber del centro de Túnez.
Nuestros amigos del Tunisian Gran Sur Xtrem nos informan que ya han llegado a Borj el Khadra, pero que todas las normas han cambiado y a pesar de la gran amabilidad y ayuda de los funcionarios y militares tunecinos, han iniciado la bajada a las 20 h del lunes.
Con todos los permisos en regla, con todos los informes favorables de la Policía turística, con nuestros guías tunecinos contratados hace casi dos meses, la nueva normativa aparecida a raíz de un incidente con unos turistas perdidos en el desierto, hacen que la norma haya sido modificada y la entrega de la autorización del Gobernador de la región se demore más de 5 horas.
Por fin, a las 18 horas, el grupo se reagrupa en Remada, desgraciadamente Toni tiene bronquitis y debe abandonar la idea de bajar al Gran Sur, junto con su compañero de viaje Joan, es la segunda vez que lo intentan y el destino se lo vuelve a impedir.
Cenamos en un descampado que hay en la gasolinera, mientras esperábamos la autorización militar que conseguimos ya recién entrada la noche. Con todas las autorizaciones y permisos en regla, iniciamos el deseado camino hacía El Borma.
Llegamos al control militar, y por fin, nos abren la barrera que nos garantiza que todos los papeles que tenemos son correctos y nos permitirán, in shalah, cumplir con la ruta prevista.
Sobre las 23 horas y a unos 10 kms de la entrada de la estación del Borma, acampamos sobre las dunas para pasar la noche.
Miércoles 19 marzo 2008
Con los primeros rayos del Sol, el campamento empieza a levantarse, las caras reflejan mucha alegría y satisfacción, de todos los grupos que habían salido desde Marsella con nosotros en el Danielle Casanova, somos el primer grupo que ha logrado llegar hasta aquí sin problemas.
Tras unos quince minutos por la amplia pista rodeada por dunas, llegamos al control militar del Borma, sin problemas nos dejan entrar, por asfalto, seguimos pasando controles, donde somos tratados con exquisita educación y amabilidad, sabemos que lo hacen por nuestra seguridad y esto refuerza nuestra voluntad de iniciar cuanto antes el gran mar de arena y dunas que está ya casi al tocar.
Salimos de la estación del Borma, y la pista va transformándose cada vez más en río de arena, a unos 20 kms deshinchamos neumáticos a una presión de 1.2, ponemos a cero el cuentakilómetros del 4×4 para medir cuantos kms haremos con las ruedas deshinchadas. Tras recorrer bastantes kms de arena blanda y algunas pequeñas dunas, llegamos a un pequeño destacamento militar que nos da el visto bueno para iniciar con libertad el Gran Erg Oriental tunecino, objetivo de este viaje. Sin haber empezado la parte más compleja del recorrido ya existe entre el primer coche y el último una distancia de unos 12 kms.
El recorrido empieza a hacerse interesante y sobre todo entretenido, grandes cordones de dunas con subidas donde hay que mezclar técnica y potencia a partes iguales, Balbino y su HDJ 80, se destapa como experto rompedor de dunas y su habilidad hace que todo este primer grupo de 4×4 le pida que abra no sólo hasta llegar a Borj el Khadra, sino durante todo el recorrido por dunas.
En un waypoint prefijado por la organización, comemos y todos los grupos se reúnen, no hay ninguna incidencia a remarcar a excepción del coche de soporte tunecino que ha roto la cardan, y ha tenido que abandonar la travesía y regresar a Matmata para repararlo.
El viento que sopla, no hace agradable este momento que tendría de ser relajante y distendido, ni la protección ofrecida por los 4×4 formados a modo de caravana del antiguo Oeste americano nos permiten resguardarnos del incómodo elemento. De todas formas el hambre supera las incomodidades y comemos sentados a pesar del molesto aire y arena que se hacen sentir de forma pesada y sin tregua.
Tras comer, los grupos reinician la marcha cada uno tomando su tiempo, sin prisas, los grandes cordones y las grandes subidas nos están esperando. Este tramo del recorrido de unos 50 kms, combina subidas adrenalínicas con plácidos teneres de arena, que permiten a los participantes tomarse como un paseo tranquilo en un paisaje de indescriptible belleza y sólo comparable con el Awari libio. Tras cada cordón el grupo que abre nos marca su voluntad de avanzar, hecho que es seguido por los grupos posteriores, por fin el grupo de Balbino alcanza el mítico punto de Borj el Khadra, el comandante en jefe del acuertelamiento, fronterizo con Libia y Argelia, nos da la bienvenida y nos informa que sólo nosotros y nuestros compañeros del Gran Sur Xtrem han llegado en los últimos días hasta aquí, esto como es normal nos da moral y nos llena de satisfacción y orgullo.
Nos dejan dormir en un lago rodeado de árboles pero a los mosquitos que allí viven no les parece una buena idea y nos invitan, a su picante manera, que nos vayamos a otro sitio. Hacemos unos 3 o 4 kms y acampamos en unas dunas muy cerca de la frontera libia.
Hoy es San José y la gran abundancia de personas que nos acompañan con ese nombre hace que el cava y la fiesta se alargue un poco más de lo normal. Se cena bien y de forma abundante, con el campamento montado con la luz del día, la gente ha podido ducharse y ponerse al día en todos los temas de limpieza y mecánica pendientes.
Jueves 20 de marzo 2008
Al despertarnos por la mañana, un par de 4×4 no tienen a punto sus baterías lo que obliga a utilizar cables con pinzas para arrancarlos.
Tras visitar un campo de rosas del desierto, situado en un chott fronterizo con Libia, reanudamos la marcha para hacer el recorrido hasta El Borma.
Los grupos definidos y muy bien consolidados, sólo reciben tres consignas, respetar los wpts, crear sus propias trazadas y la más importante, disfrutar de la navegación y las extraordinarias bajadas que habían que hacer.
Así iniciamos un recorrido que a todos satisfizo, que a todos gustó, no sólo por la conducción, sino por los paisajes tan bonitos e inmensos que estábamos recorriendo, sin duda alguna, aunque estábamos a unos 20 kms del track del día anterior, este itinerario rumbo norte, por cordones de dunas con impresionantes bajadas estaba rodeado por unos paisajes de desierto puro y color rosado que nos dejó gratamente sorprendidos a todos.
Pasamos decenas de cordones de dunas, con todo tipo de descensos, picados, muy picados, deslizantes, grandes, pequeños, pero todos divertidos y que nos permitieron al final mejorar tanto nuestra conducción en dunas que ya ni por la emisora avisábamos como eran las bajadas. El recorrido fue una experiencia que sólo se puede describir si se vive personalmente, el nivel de pilotaje fue tan alto que a las 17 horas llegábamos a El Borma, con una diferencia de escasos minutos entre todos los grupos, que aunque habían echo todos los wpts, habían hecho recorridos diferentes, a cual más espectacular y divertido. En ese momento cuando teníamos de volver a hinchar las ruedas, ya que la arena por hoy se había acabado, el cuenta kilómetros puesto a cero al deshinchar ruedas marcaba: 540 kms, QUNIENTOS CUARENTA KILOMETROS DE DUNAS Y ARENA ¡¡¡¡, todo había valido la pena, la demora en el barco, las autorizaciones, los controles, el viento,… durante dos días habíamos disfrutado como niños haciendo dunas, grandes dunas, grandes subidas y grandes descensos, navegando con el GPS buscando los wpts estratégicamente escogidos que nos obligaban a cruzar las grandes montañas de arena y dunas.
Al llegar a la gasolinera del Borma, un participante se siente indispuesto, gracias a los contactos que tenemos, ingresamos en el Ambulatorio de la base al enfermos, es tratado inmediatamente por el equipo médico del Borma y los cuidados de nuestra querida enfermera Marta, a las tres o cuatro horas, nuestro compañero enfermo empieza a recuperarse y come con normalidad.
Mientras tanto, el Director General de la Base abre las puertas al grupo para que se proteja de la infame tormenta de arena, en un lugar restringido y reservado sólo a los habitantes del Borma, se trata de un verdadero oasis, que nos protege la arena y casi del viento, podemos cenar y dormir cómodamente
en nuestras tiendas de campaña.
Viernes 21 de marzo 2008
Por la mañana, con todos los participantes al 100% y coches en buen estado de funcionamiento, salimos del Borma, por la pista hacía Matmata, a unos 40 kms, la flecha del GPS nos indica que debemos abandonar la pista principal y afrontar unas dunas que están a nuestra izquierda, algunos 4×4 deshinchan un poco las ruedas y afrontamos el nuevo reto de navegación por dunas, esta vez pequeñas y ratoneras, pero muy divertidas y entretenidas para descubrir el paso correcto. Entre dunas, hamadas, ríos de arena y rápidos teneres hacemos unos 200 kms hasta que llegamos a la pista principal e hinchamos ruedas.
Hemos reducido el recorrido previsto inicialmente en cuatro días, en sólo tres días, han sido casi 750 kms sobre la arena y por dunas, ha sido todo un éxito que sólo nosotros, en este viaje, hemos logrado, todos estamos satisfechos cuando nos dirigimos a nuestro Hotel en Matmata, donde llegamos justo con la desaparición del Sol.
Allí nos reencontramos con el grupo de Jordi Gomis que han hecho el Valle de las Dunas, desde Douz a Ksar Gilane. Cenamos, nos reunimos y tras tomar té a la menta, alegrado con algunas gotitas de aromatizante ligeramente alcoholizado nos vamos a dormir en las trogloditas habitaciones.
Sábado 22 de marzo 2008
Tras desayunar, parte del grupo visita las casas trogloditas y el escenario donde se rodó parte de la mítica película de Star Wars, con los depósitos de combustible muy mermados aprovechamos la primera gasolinera que hay en el camino hacía Gabes para rellenarlos.
El grupo llega al Jem, población mundialmente conocida gracias a su anfiteatro, el monumento romano más grande de África y declarado por la UNESCO Patrimonio Mundial de la Humanidad. Visitamos la colosal obra de arquitectura y aprovechamos para comer en un restaurante local, que nos obsequia con un exquisito “brik” de huevo.
Tras comprar por los tenderetes que rodean al anfiteatro, retomamos la carretera y nos dirigimos a Hammamet donde pasamos la noche en un original Hotel castillo de cuento, donde cenamos un suculento y buenísimo buffet.
Domingo 23 de marzo 2008
El viaje está llegando a su fin, tras desayunar en el Hotel, nos dirigimos por autopista al Puerto de Túnez donde nos dan los camarotes exteriores del barco, que curiosamente es el mismo que utilizamos a la ida. Tras unas horas de espera, pasamos los controles aduaneros y embarcamos con destino a Marsella, puerto que alcanzamos con 6 horas de retraso debido a la mala mar que nos acompaña durante gran parte de la travesía, y que gracias a la colosal estructura del barco se hace, entre comida y comida, agradable y sin incidencias.
Esta crónica no quiere acabar sin un apartado absolutamente obligado, el de los agradecimientos.
Sin duda todos los viajes de aventura, tienen momentos de dificultad o incluso de incertidumbre, pero este raid, desde antes de iniciarse pintaba como muy complicado, y ha sido gracias a muchos amigos que nos han ayudado que ha podido realizarse sin prácticamente modificaciones, es por ello que queremos desde aquí dar nuestro más sincero agradecimiento al Director General del Borma, a su personal medico y de enfermería, a los Comandantes en jefe de Borj el Khadra y Remada, a la Policía Turística y Militar, a la Guardia Nacional, al Gobernador Civil de Tatouine, al personal civil del Gobierno civil de Tatouine, al director y todo el personal del Restaurante y cocina del Hotel Berber en Matmata, al equipo tunecino, a Keneth y Marta que tanto y tan bien ayudaron y por supuesto a todos los que fuimos participes de este viaje que posiblemente permanezca en nuestra memoria por siempre como una aventura que se logró hacer a pesar de todos los obstáculos, dificultades y adversidades que tuvimos que vencer.